Con afán de que vayamos cada día viendo lo afortunados que somos al disfrutar de un medio tan especial como es el río y seamos conscientes de ese privilegio, hoy tocar observar que tiene unas características muy concretas que determinan los elementos arquitectónicos que nos acompañan en su deambular.
Los más conocidos son los puentes (Puente la REINA), pero las presas, los canales, aforos y las rapas de almadías también pertenecen al conjunto de piezas que se acercan por el construir humano hasta las vegas. Menos obvios son los molinos que desde la producción de Harina, hasta los martillos de forja para todo tipo de
siderometalurgía también han dejado preciosas construcciones. De esta última tenemos la fábrica de Orbaiceta o mas cerca aun la fábrica de armas del Arga, muy cerca de las canteras de Magnesitas. Un legado industrio-fluvial muy importante lo tenemos sobre los rios Leiza y el Urumea, se trata de tramos si grandes dificultades técnicas pero de una belleza sin par. Además y ahora con la modernidad, los parques fluviales empiezan a tener más protagonismo, acercando a los no iniciados en un espacio muchas veces desconocido. También tenemos ejemplos menos afortunados, las piscifactorías y los 
encauzamientos salvajes (véase Andorra). Los muelles fluviales más propios de otras latitudes son elementos que nos permiten acercarnos hasta las lindes acuáticas y si se te ocurre alguno más que merezca ser mencionado tienes los comentarios a tu disposición...
1 comentario:
En la parte con ifluencia árabe están las norias, hay algunas preciosas que aún están en funcionamiento. Hay algunas en el Segura, Cabriel, Júcar...
Fernando
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